En la comisión de hacienda del pasado 25 de mayo conseguimos aprobar un proyecto de ley clave para la prevención y la lucha contra el fraude y la elusión fiscal. Un éxito si tenemos en cuenta que hemos conseguido aglutinar un apoyo mayoritario en torno a un proyecto de ley al que se habían presentado 248 enmiendas. A pesar de la complejidad y de las posiciones dispares manifestadas por los grupos parlamentarios hemos conseguido alcanzar acuerdos y hemos podido incorporar medidas legislativas potentes. Entre otras cabe destacar:
- medidas para reducir el uso de efectivo a 1000 euros en operaciones en las que al menos una parte actúa como profesional o empresario,
- hemos prohibido por ley las amnistías fiscales,
- hemos actualizado la definición de paraíso fiscal y la publicación periódica de los mismos,
- la prohibición del uso de software de doble uso que pueda manipular datos contables,
- medidas para luchar contra el fraude en el entorno de las actividades de juego en todas sus manifestaciones y para reducir el fraude fiscal en el mercado de tabaco crudo.
Cambios legislativos que persiguen el interés general, garantizar y proteger los ingresos fiscales con los que financiar los servicios públicos que se han evidenciado fundamentales con la pandemia.